De todos es sabido que Bélgica es uno de los países más visitados cada año y donde podemos encontrar lugares tan característicos como la Grand Place de Bruselas pasando por el famosísimo Mannequin Pis, perdernos por las calles de Brujas y Gante o visitar la ciudad de los diamantes, como es Amberes.
En este viaje donde nosotros pasamos tres días, hemos podido disfrutar de todos estos lugares y vamos a compartir con vosotros nuestra experiencia, con algunos consejos.
Dia 1:
Nosotros nos alojamos en un apartamento que encontramos en Airbnb que por suerte encontramos en la Rue des Deux Églises. Está cerca del centro histórico y de la estación central.
El primer día solo tuvimos la tarde para echar un vistazo por la ciudad. Aún así pudimos aprovechar para probar los famosos gofres en una pequeña pastelería dedicada a ellos en una calle cerca de la Grand Place pero no tan a la vista para los turistas. Por desgracia ya no se encuentra abierta.
Tras esta pausa para recargar energías, pasamos a disfrutar de la Grand Place desde todos sus ángulos. Recomendamos hacerse un hueco en el centro y fijarse en los detalles de los edificios que la rodean. Si tu visita es durante el día, pásate un momento por la noche a ver la iluminación.
Continuamos la ruta para atravesar las Galerías Reales Saint Hubert. Merece la pena visitar los escaparates de las tiendas y ver el techo de las galerías, hecho de cristal. Aqui encontramos multitud de tiendas donde venden el típico chocolate belga. Nosotros decidimos llevarnos unos bombones de recuerdo de una llamada Les Délices du Roy.